Ciudad de Panamá, 14 de julio de 2014.- Panamá y Venezuela reiniciaron sus relaciones diplomáticas después de que hubieran sido interrumpidas durante la anterior Administración de Ricardo Martinelli, que concluyó el pasado 1 de julio, informó la Cancillería panameña.
El Ministerio de Exteriores de Panamá emitió un comunicado en el que se explica que Venezuela le había expresado su interés en "normalizar las relaciones diplomáticas, comerciales y consulares", lo que fue acogido "positivamente" por parte de la Cancillería panameña.
Panamá respondió al interés venezolano proponiendo "la inmediata reapertura de las Misiones Diplomáticas respectivas, enfatizando en los principios de soberanía, independencia y autodeterminación que regula el Derecho Internacional buscando promover la amistad y cooperación entre las naciones".
"El Gobierno panameño ha sido claro en su interés y vocación de ser un país de diálogo, convergencia, tolerancia y mediación, y son estos principios los que orientarán la posición de Panamá en su relación con el resto de naciones", concluye el breve comunicado de la Cancillería de Panamá.
El vicepresidente venezolano, Jorge Arreaza, anunció el restablecimiento total de las relaciones entre Venezuela y Panamá cuando asistió el pasado 1 de julio a los actos de investidura del presidente panameño, Juan Carlos Varela.
Arreaza indicó que participó en las actividades de traspaso de poder en Panamá acompañando, afirmó, al presidente Varela "en esta nueva etapa de la democracia que va a ser mucho más lúcida y mucho más hermosa que la etapa recientemente" concluida de la Administración de Martinelli.
Varela ya había afirmado tras ganar las elecciones generales del 4 de mayo pasado su intención de reanudar plenamente las relaciones con Venezuela e incluso envío a Caracas un emisario para ello.
El anuncio hecho el 1 de julio por Arreaza se dio más de un mes después de que Panamá comunicara, a fines de mayo pasado, que había comenzado el proceso de reanudación de las relaciones consulares con Venezuela con el intercambio de las notas diplomáticas correspondientes.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, rompió el pasado 5 de marzo unilateralmente las relaciones diplomáticas y congeló las comerciales con Panamá.
Maduro tomo la decisión de romper todo vínculo con Panamá por entender como una injerencia la propuesta del país centroamericano de que la situación de Venezuela, donde en ese momento se estaban produciendo continuas protestas callejeras y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, fuera analizada en la Organización de Estados Americanos (OEA).
Luego de la ruptura de las relaciones, Panamá presentó "notas de protesta" ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) por lo que consideró medidas "discriminatorias" de Venezuela, entre ellas, la suspensión del pago de una deuda millonaria que mantienen importadores venezolanos con exportadores panameños de la Zona Libre de Colón, según reclaman autoridades y empresarios locales.