Quito, 12 de diciembre de 2014 (PL).- Participantes en un seminario internacional sobre las relaciones entre América del Sur y África coincidieron en resaltar las potencialidades que ofrece una mayor integración económica, comercial y política entre ambas regiones.
Hoy África emerge como un actor de primer orden en busca de un espacio propio en el concierto global, aseguró el subsecretario para América Latina y el Caribe de la cancillería ecuatoriana, Galo Galarza, en la apertura del evento preparatorio para la IV Cumbre América del Sur-África (ASA), a celebrase en Quito en 2016.
Tras señalar que las economías de ambos continentes se basan en la exportación de materias primas, el funcionario abogó por establecer una cooperación mutuamente beneficiosa y complementaria que otorgue valor agregado a esos productos exportables, y promueva la industrialización mediante el desarrollo de talento humano propio.
Según Galarza, esa colaboración debe extenderse a los ámbitos de la salud, la educación, la transferencia tecnológica, el comercio y las inversiones.
También llamó a aunar esfuerzos en el plano multilateral, pues muchos problemas que nos aquejan, remarcó, tienen su origen en un oprobioso orden mundial que debe ser reformado.
Es por eso que el dialogo político entre Suramérica y África se vuelve actual y necesario, apuntó Galarza, quien confirmó que como parte de ese interés, Ecuador abrirá próximamente otras cinco embajadas en el continente africano.
El viceministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Reinaldo Bolívar, también se mostró esperanzado en que la cumbre de la ASA de 2016 ayude a consolidar las relaciones entre ambos continentes.
Ya existen proyectos bilaterales, pero ahora falta concretar proyectos multilaterales, donde los 55 países africanos y los 12 suramericanos digan que van a trabajar juntos, comentó Bolívar a Prensa Latina.
El funcionario venezolano enumeró como algunas de las áreas de esa eventual cooperación multilateral la agricultura, minería, hidrocarburos, ciencia y tecnología.
El embajador de Egipto en Ecuador, Medhat K. El-Meligy, acotó, por su parte, que las potencialidades de esos vínculos económicos y comerciales entre los dos continentes son harto conocidas, pero lo novedoso, aseguró, es la voluntad política existente ahora para concretar una relación basada en el respeto mutuo.
Estoy muy optimista, porque en términos de cooperación entre América del Sur y África, el cielo es el límite, sentenció el diplomático, en un aparte con Prensa Latina.
El seminario internacional de dos días es organizado por la cancillería ecuatoriana y Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales.
En los paneles y mesas redondas se discute sobre la situación económica, financiera, comercial y de inversiones en África, el desarrollo sostenible en ese continente, sus programas de cooperación con el resto del mundo, y las posibilidades y perspectivas del Foro ASA.