París, 25 de febrero.- El mundo corre el riesgo de caer en una era de crecimiento más lento y de desempleo más alto, a menos que los gobiernos logren realizar amplias reformas estructurales, según advirtió la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), compuesta principalmente por naciones ricas, durante las conversaciones que tuvieron lugar en Sídney, Australia, entre los ministros de finanzas del G-20 y los banqueros centrales.
En un informe, la OCDE, con sede en París, lanzó la más reciente advertencia sobre cómo la ausencia de reformas está pesando sobre el crecimiento.
A principios de este mes, el Fondo Monetario Internacional dijo que unas reformas agresivas le aportarían US$2,25 billones adicionales al tamaño de la economía mundial antes de 2018.
La OCDE dijo que el ritmo de las reformas se había desacelerado durante los últimos dos años, lo cual dejaba a las economías emergentes vulnerables a los apretones de política monetaria, mientras la crisis financiera era menos grave.
La advertencia fue repetida por Estados Unidos, que rechazó las preocupaciones de las economías emergentes con respecto a la decisión de la Reserva Federal de reducir su programa de relajamiento cuantitativo.