Washington, 5 de septiembre de 2014.- En el segundo día de la XVIII Conferencia CAF, líderes políticos, reconocidos empresarios y académicos de América Latina y otras regiones, hicieron un llamado a la integración, argumentando que existe una gran oportunidad por aprovechar.
El orador principal de la sesión matutina fue Enrique Iglesias, ex Secretario General Iberoamericano, quien destacó que la combinación de las economías latinoamericanas alcanza los $7 billones de dólares. "Latinoamérica puede aprovechar este poderoso mercado", destacó Iglesias y planteó que América Latina debe centrarse en la creación de cadenas de suministros, el aumento en la productividad y la competitividad a nivel global.
"Nuestros mercados son la principal oportunidad de América Latina, pero para poder aprovechar esa oportunidad es necesario que se produzca una integración regional seria", dijo José Antonio Ocampo, ex ministro de Finanzas de Colombia durante su intervención en un panel que se centró en las perspectivas económicas de América Latina y que estuvo moderado por el presidente ejecutivo de CAF, Enrique García.
En este debate participaron también Alberto Moreno, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Mario Bergara, ministro de Economía y Finanzas de Uruguay, Joao Carlos Ferraz, director general del Banco de Desarrollo de Brasil, Jorge Familiar, vicepresidente para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, y Alejandro Werner director del departamento de Asuntos Hemisféricos del Fondo Monetario Internacional.
Los participantes de este panel coincidieron en que la región debe crecer a un ritmo mayor. "Si seguimos creciendo 3% por año, nunca cerraremos la brecha entre América Latina y los países industrializados", subrayó Enrique García, presidente ejecutivo de CAF -banco de desarrollo de América Latina.
Haití fue tema central de este segundo día de debates. Marie Carmelle Jean-Marie, ministra de Economía y Finanzas de Haití compartió un panorama de los esfuerzos de recuperación de su nación tras el devastador terremoto de 2010, pero destacó que Haití debe alejarse de lo que calificó como un modelo fallido de dependencia humanitaria.
"Haití no es un estado fallido. Esta noción es absolutamente errónea. Debemos ver a Haití como un estado en recuperación", agregó que Haití pretende convertirse a mediano plazo en una economía abierta a los mercados internacionales y una economía cuyos riesgos sean proporcionales a los retornos sobre la inversión. "Nuestro objetivo es ser una economía emergente de aquí al 2030", señaló.
La ministra desatacó que en materia económica la inversión internacional en Haití aumentó 20% y la inversión privada 30%. También destacó logros en materia de educación con una escolaridad primaria que alcanza el 84%.
Jean-Marie agradeció la ayuda que recibió de la comunidad internacional y organismos como CAF. Reconoció que sin ese respaldo no se hubiesen alcanzado esos logros. Por otra parte anunció la próxima creación de un fondo de inversión orientado a proyectos económicamente viables de infraestructura, agroindustria, turismo e infraestructura. Y destacó que con estos proyectos se hará frente a uno de los principales desafíos que todavía enfrenta Haití con un desempleo que alcanza en 40%.
Los panelistas debatieron temas como los cambios en la matriz energética de América Latina y los retos hemisféricos de la región veinte años después de la primera cumbre de las Américas.
Con un reconocimiento a la creciente influencia de las mujeres se cerró esta conferencia que contó con la asistencia de más de mil doscientos líderes de opinión, políticos y empresariales que se dieron cita en Washington D.C., para debatir y analizar los retos, las tendencias económicas y políticas y los temas más relevantes de América Latina.
El evento anual es organizado por CAF -banco de desarrollo de América Latina-, el Diálogo Interamericano y la Organización de Estados Americanos (OEA).