Washington, 30 de abril.- La Conferencia “Alianzas para la Inclusión Financiera en América Latina y el Caribe: un Catalizador para el Crecimiento Inclusivo” de la Red Interamericana de Protección Social de la Organización de los Estados Americanos (OEA/RIPSO) fue inaugurada ayer en la ciudad de Nueva York con la presencia de ministros y altos representantes de gobiernos y del sector privado provenientes de más de 25 países de América Latina y el Caribe.
La inauguración del evento contó con la presencia del Secretario General Adjunto de la OEA, Embajador Albert Ramdin, quien analizó la importancia de posicionar el tema de la inclusión como centro de todo los esfuerzos por lograr un crecimiento económico sostenido. El Embajador Ramdin resaltó que "durante demasiado tiempo, muchos de nuestros pueblos han estado sobreviviendo al margen de las oportunidades y muchos han perdido la opción de alcanzar una vida mejor, debido a la falta de conocimientos y de oportunidades”. El Secretario General Adjunto destacó que en dicho contexto, las instituciones públicas y financieras tienen el rol de abordar este reto. "Para que el desarrollo sea sostenible, este debe basarse en la cooperación, en alianzas y políticas eficaces, comprensibles y transparentes", afirmó, y comentó que una inclusión financiera eficaz “tiene el potencial de aliviar la pobreza y la inequidad, pero sólo cuando esta es apoyada de una buena planificación”. “El problema no es sólo proporcionar acceso a los recursos financieros, sino saber cómo manejarlos", aseguró.
El Embajador Ramdin habló de la importancia de fortalecer el rol que desempeña el sector privado en el desarrollo y en la necesidad de promover la cooperación público-privada. “Un acceso amplio a los servicios y productos financieros tiene el potencial de desencadenar el cambio social necesario para un mayor desarrollo en las Américas; todas las partes deben entender que el impacto social de la inclusión financiera va en beneficio de todos, se trata no sólo de una buena política pública, sino una buena inversión en el futuro de nuestras sociedades” insistió.
La Secretaria de Estado Adjunta del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Roberta Jacobson, por su parte, se refirió al tema de la inclusión financiera “como un elemento fundamental para una democracia sana y vibrante”. “Los ciudadanos deben ser parte central del sistema financiero, tal como lo son en el sistema político, lo que significa que no sólo son políticamente astutos, sino que también poseen una cultura financiera sólida" comentó Jacobson, y recordó estadísticas que indican que hoy en día más de mil millones de mujeres de todo el mundo carecen de acceso a herramientas financieras básicas. “Para hacer crecer nuestras economías, lograr redes adecuadas de protección social y fortalecer nuestras democracias, debemos hacer que nuestros sistemas financieros sean más incluyentes y receptivos a las necesidades de todos los habitantes de la región", concluyó.
El Presidente del Fondo Ciudades por la Capacitación Financiera, Jonathan B. Mintz, aludió a la responsabilidad de los gobiernos de proveer a sus ciudadanos opciones financieras que ayuden al desarrollo de las poblaciones. "Los gobiernos locales y líderes están en una posición única para guiar a los miembros de las comunidades marginadas hacia la corriente principal financiera; la falta de acceso a servicios financieros seguros y de alta calidad es un problema que va más allá de las fronteras de Estados Unidos, por eso esperamos dar apoyo a la Red Interamericana de Protección Social de la OEA para promover la inclusión financiera en las Américas", sostuvo.
Julie Menin, Comisionada para el Departamento de Asuntos del Consumidor de la Ciudad de Nueva York, compartió algunas de las experiencias que se han adelantado en dicha ciudad y el impacto positivo de las mismas. "La Ciudad de Nueva York atrae a personas de todo el mundo, incluyendo muchos de los países cuyos representantes participan en esta Conferencia de Inclusión Financiera" dijo Menin, y recordó el compromiso asumido por la agencia que dirige de “encontrar nuevas e innovadoras formas de promover oportunidades económicas para todos los neoyorquinos, especialmente los inmigrantes y las comunidades de bajos ingresos”. “Es a través de asociaciones y del intercambio de información que podemos lograr desarrollar programas que tengan un impacto real y lograr la estabilidad financiera que nuestros ciudadanos merecen," afirmó la Comisionada Menin.
Sherry Tross, Secretaria Ejecutiva para el Desarrollo Integral de la OEA, recordó que la Red Interamericana de Protección Social (RIPSO) fue lanzada hace cuatro años en Nueva York y que desde entonces se han alcanzado importantes avances en la materia, entre ellos la creación de nuevos ministerios encargados del tema de desarrollo social, el aumento del intercambio e interacción entre entidades gubernamentales y no gubernamentales de los países que la conforman, el crecimiento de iniciativas de cooperación horizontal y el impulso de una plataforma donde expertos pueden acceder para compartir experiencias. “Sobre la base de los logros alcanzados, tenemos grandes expectativas de los que podemos lograr con esta conferencia”, afirmó.
La conferencia, que se extenderá por dos días, busca ofrecer una oportunidad para que funcionarios gubernamentales de América Latina y el Caribe compartan experiencias exitosas de programas de capacitación financiera. El objetivo es crear un foro informativo que promueva los beneficios de tener un sector financiero más inclusivo, con productos y servicios dirigidos a poblaciones vulnerables, así como destacar ejemplos positivos de inclusión financiera y posibles soluciones por parte de proveedores de servicios financieros y fundaciones que involucrarían alianzas público-privadas.
Por medio de paneles de diálogo entre el sector privado y funcionarios de gobiernos, el evento aspira a generar un debate en torno a temas relativos a: los beneficios de la inclusión financiera, las experiencias existentes; los programas de creación de activos; las iniciativas de gobiernos locales; la creación de entornos propicios para la inclusión financiera; y la alineación esfuerzos para el crecimiento inclusivo, entro otros.
La inclusión financiera y la creación de activos están en el centro de la agenda de desarrollo de la Red Interamericana de Protección Social (RIPSO), un mecanismo de cooperación establecido por los Estados Miembro de la OEA en 2009 para el intercambio de información sobre experiencias exitosas y conocimientos en materia de protección social en las Américas. El evento es organizado conjuntamente por la OEA, el Departamento de Estado de los Estados Unidos, el Fondo Ciudades por la Capacitación Financiera (CFE) y la Oficina de Capacitación Financiera del Departamento de Asuntos del Consumidor de la Ciudad de Nueva York (OFE).