Georgetown, 19 de diciembre de 2014 (EFE).- El presidente de la Comunidad del Caribe (CARICOM), Gaston Browne, expresó su satisfacción por el acercamiento anunciado entre EE.UU. y Cuba y la flexibilización de las restricciones a la circulación de personas, mercancías y capitales, medidas que calificó de "históricas".
"Es un motivo de gran satisfacción para mí que el apoyo decidido que los países de CARICOM llevaron a cabo desde 1972 para detener el aislamiento de Cuba haya ayudado a producir este resultado", dijo el también primer ministro de Antigua y Barbuda.
Browne dijo en una declaración escrita que recuerda "con orgullo" que hace tan sólo nueve días, con ocasión de la Cumbre de CARICOM-Cuba celebrada en La Habana, pidió al Congreso de EE.UU. que pusiera fin al "inútil" embargo a la isla.
"Este anuncio es el final de un largo y costoso viaje en nuestro hemisferio y, finalmente, permite el diálogo y el intercambio entre todas las naciones de nuestro continente de una manera civilizada y constructiva", dijo.
La Secretaría de CARICOM, con sede en Guyana, también dio hoy la bienvenida al deshielo de las relaciones entre EE.UU. y Cuba y al avance hacia el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.
"CARICOM ha sido durante mucho tiempo un defensor de la normalización de estas relaciones y ha planteado la cuestión en varias ocasiones en su interacción con las dos partes", dijo su secretario general, Irwin La Rocque, en un comunicado.
Añadió que "el anuncio señala el comienzo de una nueva era en nuestro hemisferio y demuestra el valor del diálogo como medio para solventar diferencias".
La organización regional elogió a los presidentes de EE.UU., Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, "por su audaz iniciativa" y valoró el hecho de que ambos países hayan "jugado un papel importante en la asistencia de los esfuerzos de desarrollo de nuestros Estados miembros".
"Esperamos con interés trabajar junto con ellos a medida que avanzan en la construcción de su relación", añadió, sin dejar de recordar que aún está pendiente el levantamiento del embargo unilateral impuesto por EE.UU. a Cuba en los años 60, algo que espera que ocurra "con prontitud".
Para La Rocque, Obama anunció medidas que terminan con un "enfoque anticuado que durante décadas no ha logrado avanzar nuestros intereses".
Los planes establecidos por EE.UU. incluyen revisar la designación de Cuba como un estado patrocinador del terrorismo, reducir las restricciones financieras, aumentar los enlaces de telecomunicaciones y tratar de avanzar hacia el levantamiento del embargo comercial.