Montevideo, 8 de septiembre de 2014 (PL).- El fortalecimiento del comercio entre los países de América Latina y el Caribe, cuyo crecimiento es considerado lento, constituye hoy uno de los grandes retos para la integración regional.
Las estadísticas muestran que, precisamente, cuando grandes potencias extrarregionales se interesan por sus productos y servicios, el comercio interregional sólo alcanza el 17 por ciento de los negocios globales.
La Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI), con sede en esta capital, informó no obstante que en el año 2013 esos negocios alcanzaron los 175 mil millones de dólares y que es grande su potencial de crecimiento.
La embajadora peruana Aida García Naranjo, presidenta del Comité de Representantes de la ALADI, informó que en el último período se registraron ocho nuevos acuerdos de alcance parcial y 43 protocolos adicionales.
Por ello, el exvicepresidente argentino Carlos Chacho Álvarez, secretario general de la ALADI, recién reelecto hasta el 2017, viene impulsando una iniciativa con la que procura dar un vuelco a esta situación.
Se trata de realizar una macro-rueda de negocios, la primera de estas características, denominada Expo-ALADI, que espera reunir aquí durante tres días a representantes de más de 900 empresas de la región.
Convocó, además de las firmas públicas y privadas de los miembros del bloque (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela), a las de los países centroamericanos.
Álvarez destacó al respecto que el 90 por ciento de las empresas de América Latina y el Caribe son medianas, pequeñas o micro (Mipymes), por lo que es necesario identificar posibles cadenas de valor entre ellas.
Planteó asimismo la necesidad de seguir bajando los aranceles, facilitar la logística y aumentar el financiamiento para las Mipymes, entre otras medidas.
Este encuentro, aseguró, está en consonancia con los mandatos de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) respecto a las Mipymes y la promoción del comercio regional.
EXPO-ALADI, a realizarse los días 8, 9 y 10 de octubre, está diseñada como "herramienta para incrementar y fortalecer" los acuerdos depositados en la asociación y lograr nuevos compromisos en sectores específicos.
La ALADI definió como "estratégicos" los siguientes: agroindustrial; alimentos y bebidas procesadas; automotriz y autopartes; equipos médicos; químicos y plástico; servicios vinculados a las TICs; textiles, confección y calzado.
Según la agenda del evento, el primer día será dedicado a conferencias y paneles y los dos días siguientes serán exclusivamente para realizar ruedas de negocios.
La importancia del acto inaugural de Expo-ALADI la marcan también los probables oradores, en proceso de confirmación, como el propio presidente José Mujica, un fuerte impulsor de la integración latinoamericana.
Por ejemplo, están invitados asimismo Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), y Enrique Iglesias, Secretario General Iberoamericano, entre otros.
Un panel, en el que participarán varios ministros de comercio de la región, abarcará el "Panorama económico y comercial 2014 y perspectivas para el 2015", mientras otro abordará formas de insertarse en cadenas de valor regionales.
En el fondo de toda esta actividad, parece persistir una gran interrogante: ¿cómo eliminar los obstáculos para alcanzar un dinámico comercio entre empresas de la propia región?
