Bogotá, 28 de agosto de 2014.- Cerrando el semestre anterior se publicó el reporte de la Organización Mundial del Turismo (OMT) que ofrece variados indicadores sobre las dinámicas de tal actividad económica alrededor del planeta.
Titulado “Panorama OMT del Turismo Internacional, edición 2014”, el reporte brinda un horizonte completo en relación con el movimiento de personas durante 2013 y define tendencias que parecen relevantes al momento de analizar el comportamiento de los destinos turísticos considerados tradicionales en dicha materia. Perú, Ecuador y Colombia registraron importantes ascensos en la región latinoamericana.
Las cifras del informe que otorga la OMT señalan que el aumento en la cuota del mercado que las economías emergentes han mostrado desde 1980 ha tenido un movimiento significativo desde 30% en ese año hasta 47% en 2013, y se proyecta que en unos 15 años se haya llegado a una estimación de 57%, que en cifras más claras equivaldría al arribo de 1.000 millones de turistas internacionales a esos destinos.
Sin duda, esto hace que los países hoy vinculados al grupo de economías en desarrollo (emergentes) tengan un panorama alentador en materia de turismo; hecho que no se presenta en tradicionales destinos como Europa y Norteamérica.
Según el reporte, es previsible que entre 2010 y 2030 el ritmo de crecimiento de llegadas a destinos emergentes supere por dos al de las economías avanzadas, no obstante hoy Europa siga manteniendo el primer lugar (al analizar las cifras en términos absolutos). Para 2013, el Viejo Continente recibió 563 millones de turistas de los 1.087 que se movieron por todo el mundo, es decir 51,8% del total de dicho mercado.
En América Latina se presenta una concordancia entre su desempeño económico, acompañado de mejoras sociales en varias de sus naciones, y los resultados del reporte citado. En general, el Caribe es una región con estable crecimiento en tal materia, a pesar de que sus cifras, como consolidado, son apenas de 2%, siendo Puerto Rico el destino más atractivo para los turistas, con un incremento de 4%, en relación con 2012. México, por su parte, reportó un incipiente 1%.
En Suramérica está el caso más sorprendente y quizá inexplicable: Perú. El crecimiento de la tasa de turistas llegados al país Inca es de 11%, de acuerdo con la OMT. El dato sorprende porque con base en la información que ofrece la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (Comex), para el primer trimestre de este año el flujo de turistas que arribaron al país decreció de manera ostensible si se compara con las cifras de años anteriores.
Según Comex, las reiteradas protestas sociales y la inseguridad latente que se vive en los principales centros urbanos de Perú han hecho que esta cifra descienda de manera pronunciada. Es un caso que debe estudiarse cuidadosamente.
Otras dos naciones andinas se situaron en muy buena posición de crecimiento en el número de visitantes internacionales, Ecuador (7%) y Colombia (5%) que, junto con Paraguay (5%), mantienen la tendencia de los últimos años. Sin lugar a dudas, la industria del turismo representa una más de las posibilidades que América Latina ofrece a propios y extraños en materia de inversión y generación de empleo.
Se trata acá, como ya se ha dicho en otras líneas, de generar las sinergias que conduzcan a la creación de proyectos sólidos, serios y, sobre todo, consecuentes con las realidades regionales. Algunos ya están en marcha, otros llegarán en la medida en que el Estado trace líneas certeras y seguras para que empresarios y emprendedores maniobren sin temor.