Brasilia, 6 de marzo (Xinhua).- China y Brasil, ambos países grandes en vías de desarrollo, pueden lograr un desarrollo de beneficio mutuo en la cooperación en muchos campos, incluidos los sectores económico, comercial, de protección medioambiental y del fútbol, aprendiendo uno del otro y colaborando, indicó el embajador chino en Brasil, Li Jinzhang.
Li, también miembro del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), el máximo órgano asesor político, hizo estas declaraciones en una entrevista exclusiva concedida a Xinhua el miércoles en Beijing, en el marco de la sesión anual de la CCPPCh, que comenzó el lunes 3 y concluirá el próximo 12 de marzo.
La prensa internacional se mostró pesimista respecto al BRICS, ya que los países miembros, a saber Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, deceleraron su crecimiento económico el año pasado, pero el embajador chino no está de acuerdo.
Según Li, los altibajos en el desarrollo económico son normales y la situación económica de estos países es buena en general a pesar de las desaceleraciones, ya que el crecimiento medio de los cinco países ha duplicado al de los países desarrollados que están en recuperación económica.
Al mismo tiempo, la economía no siempre se desarrolla sin problemas, ya que las economías emergentes se enfrentan a una serie de desafíos tales como la reestructuración económica, la estabilización de la situación financiera y la innovación tecnológica.
Li consideró que la colaboración pragmática, complementaria y de beneficio mutuo entre los países del BRICS tiene un gran potencial y expresó su confianza en que la cooperación estrecha y el desarrollo común de estos países se hagan realidad con el paso del tiempo.
De acuerdo con el embajador chino, en 2013, la cooperación económica práctica entre China y Brasil superó los 90.000 millones de dólares y China se convirtió en el primer socio comercial de Brasil, mientras que ambos países colaboraron en los asuntos internacionales para representar mejor los intereses de los países en vías de desarrollo e impulsar un orden internacional más igualitario, más razonable y más justo.
En cuanto a la protección del medio ambiente, Li opinó que China puede aprender de Brasil, ya que el país sudamericano lo ha hecho "muy bien en la construcción de la civilización ecológica".
Conforme a Li, Brasil da importancia a la armonía entre el ser humano y el medio ambiente en el desarrollo de su economía, así como a la colaboración científica del desarrollo económico y a la protección medioambiental. De esta manera, cada proyecto tiene que ajustarse a los rigurosos requisitos y estándares de protección ecológica antes de su puesta en marcha y durante su desarrollo.
Además, Li, aficionado al fútbol, expresó sentimientos encontrados al tratar de la situación del fútbol de China, especialmente cuando se la compara con la del país sudamericano.
De acuerdo con sus palabras, el fútbol chino tiene que llevar a cabo reformas completas, desde la idea de desarrollo hasta el sistema y el mecanismo.
"Los amigos brasileños y yo mismo creemos que China posee la sabiduría y la capacidad para convertirse en una potencia futbolística del mundo", indicó Li.
En la actualidad, varias empresas chinas han comenzado a cooperar con los clubes brasileños de fútbol para establecer escuelas y centros de formación para jóvenes y adolescentes chinos, según Li.