La Habana, 26 de noviembre de 2014 (PL).- El Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) ejecuta hoy 60 proyectos en 21 países de América Latina y el Caribe, en beneficio del pequeño productor rural, según su vicepresidenta Josefina Stubb.
Invertimos en el campo en favor de la gente pobre, apoyando al pequeño agricultor y su familia para que produzcan más, a transferirles tecnologías a fin de que tengan mejor acceso a los mercados, a los recursos financieros y conocimientos de todo tipo, precisó además la funcionaria en diálogo con Prensa Latina.
Apoyamos a ese sector porque hoy el 80 por ciento de los alimentos en el mundo lo aportan los pequeños productores rurales, agregó Stubb, quien señaló que el FIDA -cuya sede radica en Roma- está presente en 190 países.
Lo más importante es que los proyectos que respaldamos tienen una fuerte contribución financiera y técnica de las naciones. Estos recursos monetarios se prestan para que se puedan invertir y regresan con un interés a fin de retroalimentar la organización, acotó.
Tales programas en la región abarcan desde México hasta el cono Sur, y ahora Cuba con el Proyecto de Desarrollo Rural Cooperativo en la Región Oriental (Prodecor), que se ejecuta en la Isla desde hace varios meses y debe beneficiar a 18 municipios de las provincias de Las Tunas, Holguín, Granma y Santiago de Cuba.
En el lanzamiento oficial de ese proyecto, efectuado recientemente en La Habana con la presencia de Stubb, se explicó que el Ministerio de Agricultura (Minag) es el principal organismo responsable de su ejecución, a través del Grupo Agroindustrial de Granos (GAIG).
A juicio del ministro de Agricultura, Gustavo Rodríguez, la existencia en este sector de seis mil cooperativistas, así como de muchos cuadros universitarios que se desempeñan en la esfera y una alta escolaridad de los trabajadores del campo, entre otras, son bondades con que cuenta para su realización este programa, que representa una inversión de 45 millones de dólares.
De esa cifra, 10,2 millones corresponden a un préstamo del FIDA y una donación de ese organismos de 0,5 millones de dólares.
El resto, a un préstamo del Fondo Fiduciario de España y una contrapartida del gobierno cubano, que cubrirá capacitaciones y estudios en el país, los contratos con empresas públicas y los gastos recurrentes de operación.
Creado en 1977, el FIDA es una agencia especializada de las Naciones Unidas y su objetivo es servir exclusivamente a los pobres en zonas rurales de los países en desarrollo.