Managua, 7 de octubre de 2014 (EFE).- El Gobierno de Nicaragua pidió ayer lunes a Estados Unidos que le renueve el régimen arancelario preferencial (TPL, por sus siglas en inglés) que concluye el próximo diciembre, bajo el argumento de que no lograron todos sus beneficios durante tres de los diez años que ha estado en vigor por la crisis financiera estadounidense.
“Estamos haciendo ver a Estados Unidos que entre esos diez años (de TPL), perdimos tres, porque cuando se dio la crisis financiera e inmobiliaria de 2008, 2009 y 2010, a nosotros se nos cayó la producción textil por culpa de ellos”, dijo el asesor presidencial de Nicaragua para asuntos económicos, Bayardo Arce, a periodistas.
El TPL permite a Nicaragua introducir en Estados Unidos hasta 100 millones de metros en prendas de vestir elaboradas con telas o hilos no originarios de los países procedentes del DR-CAFTA.
Ese régimen arancelario preferencial ha permitido generar 100,000 empleos en Nicaragua, principalmente en el régimen de zona franca.
En caso de que no sea renovado el TPL a finales de año, se perderán 33.000 puestos de trabajo en este país centroamericano, de acuerdo con las autoridades y fuentes del sector.
Según Arce, Nicaragua cuenta con el apoyo de la industria textil estadounidense, “porque la hilaza que se ocupa aquí (en Nicaragua) para la producción textilera se la compramos a los norteamericanos”.
Lo que hará el Gobierno de Nicaragua, más que negociar, es “cabildear” por la permanencia del TPL, explicó el funcionario.
Tanto los empresarios nicaragüenses como el Gobierno de Nicaragua consideran el TPL como un elemento clave para la economía nacional.
Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones de Nicaragua, con el 25 % del mercado, según cifras oficiales.
Datos:
- Nicaragua exportó en total 4.598 millones de dólares durante 2013, de los cuales 2.031 millones de dólares fueron bajo el régimen de zonas francas.
- La decisión estadounidense sobre el TPL con Nicaragua se tomará en diciembre de 2014.